13/05/20

Eliminación sostenible de residuos médicos en Costa de Marfil

Volviendo a Costa de Marfil

Apenas dos años después de la finalización de su proyecto inicial en Costa de Marfil, Addfield ha vuelto a recibir el encargo de ofrecer más soluciones esenciales para la eliminación de residuos médicos en laboratorios y clínicas de todo el país.

Como parte de un programa de inversión continua en el medio ambiente en toda Costa de Marfil, supervisado por el Laboratorio Nacional de Alimentación y Salud Animal (LANADA) en nombre del Gobierno y patrocinado por los programas de ayuda internacional de USAID y el PMA. Este proyecto ha avanzado en varias etapas para eliminar de forma segura los residuos médicos peligrosos. El proyecto inicial era originalmente para una ubicación, desde entonces se ha ampliado para cubrir múltiples ubicaciones en toda la región, comenzando con la histórica ciudad de Bingerville.

A partir de 2018, cuando SOFIM SARL contrató por primera vez a Addfield para ofrecer una solución. Esta primera etapa del proyecto fue para la incorporación de dos modernos incineradores que serían capaces de eliminar limpiamente grandes cantidades de residuos peligrosos creados a través de sus instalaciones de investigación y pruebas.

Estos laboratorios creaban una serie de residuos que incluían subproductos animales y biomédicos, por lo que necesitaban dos máquinas para tratarlos de forma segura. Tras una amplia investigación, seleccionaron el MP100 y el MP200, que cumplían y superaban las especificaciones requeridas.

«Addfield se enorgullece de ampliar su red en Costa de Marfil; es otro caso de entrega de un paquete completo de soluciones para responder a las necesidades de nuestros clientes en cualquier lugar de África; además de suministrar una máquina de última generación, vamos más allá para proporcionar apoyo directo in situ, ya sea formación, asistencia de comunicación multilingüe, piezas de repuesto, etc.». Abraham Bah, Representante/Distribuidor de Addfield para África.

El suministro e instalación de estos incineradores Addfield fue tan bien recibido que llegó a los titulares de las noticias locales. Instalados originalmente en julio de 2018, después de dos años de funcionamiento continuo, el cliente ha vuelto a Addfield satisfecho en el rendimiento de las máquinas, su fiabilidad y el apoyo de seguimiento continuo por parte de los técnicos y representantes de Addfield. El impacto que estas máquinas han tenido en el medio ambiente y en las comunidades locales es inmenso y ha sido reconocido. Como resultado de ello, SOFIM SARL ha vuelto a seleccionar a Addfield para que suministre otras tres máquinas MP200 para actualizar más centros de salud y laboratorios en todo el país.

Antes de que se instalaran estas máquinas, los residuos se eliminaban quemándolos abiertamente en el patio trasero del centro. Un enfoque que dio lugar a muchas quejas de los residentes locales sobre el humo y los olores que se creaban regularmente. El impacto de esta contaminación atmosférica se había convertido en un verdadero motivo de preocupación, pudiendo causar graves problemas de salud tanto al personal como a la comunidad circundante.

Por desgracia, esta práctica es demasiado habitual en muchos países en desarrollo. No se ha dado prioridad a la eliminación de los residuos, por lo que la incineración a cielo abierto es habitual para destruir los residuos médicos. Este enfoque dista mucho de ser el ideal. En comparación con la incineración controlada, las hogueras abiertas corren el riesgo real de propagar enfermedades y peligros. Desde partículas flotantes y trozos de residuos que pueden transportar bacterias más allá de los terrenos, hasta la liberación de sustancias químicas altamente tóxicas a la atmósfera cuando se queman plásticos y otros materiales. Además del aspecto de la contaminación atmosférica, el volumen de residuos no se reduce en gran medida, lo que hace que los residuos contagiosos se sigan eliminando en los vertederos o en los basureros locales. Aunque un fuego abierto controlado puede alcanzar temperaturas cercanas a los 900°C en algunos lugares, las temperaturas pueden ser considerablemente más bajas en otros, lo que da lugar a una combustión desigual que deja algunos residuos prácticamente intactos. Una incineradora Addfield MP cuenta con múltiples cámaras que garantizan la destrucción y esterilización segura de todos los residuos. La primera cámara destruye los residuos, quemándolos a temperaturas de hasta 1.000°C, y reduciéndolos a cenizas estériles seguras a sólo un 3% del volumen inicial, lo que es suficientemente seguro para el vertido en la mayoría de los países. Después de la cámara primaria, la cámara secundaria trata los gases residuales eliminando todos los olores, el humo y, lo que es más importante, los patógenos, los furanos y los contaminantes, quemando a temperaturas de hasta 1100°C a lo largo de un tiempo de retención de 2 segundos que garantiza que sólo se devuelvan al medio ambiente los gases limpios, lo que supone una enorme mejora para la comunidad local.